En 2015 la economía de las familias mexicanas ha sufrido un golpe tras otro por las erráticas medidas del gobierno federal, y por lo que se ve, para el próximo año las cosas serán todavía peores.

Por lo pronto, ya se avizora un fuerte aumento a los precios de los combustibles de acuerdo al esquema tributario aprobado por el Congreso en el Paquete de Ingresos 2016.

A penas comience el año, el gobierno nos asestará un nuevo “gasolinazo” equivalente a un aumento del 3 por ciento en el precio de los combustibles.

Como lo he mencionado antes, el incremento al precio de la gasolina es un impuesto disfrazado para compensar la pérdida de ingresos provenientes la exportación de petróleo.

De acuerdo a los indicadores económicos, la devaluación continuará con la divisa mexicana en caída libre hasta alcanzar los 19 ó 20 pesos por dólar… antes de concluir el 2015.

Las reformas impuestas por el gobierno de Peña Nieto son un fracaso.

El Fondo Monetario Internacional recortó en un 20 por ciento el pronóstico de crecimiento para la economía mexicana lo que echa por tierra las expectativas generadas por el gobierno.

Con una economía que no crece, con el peso en picada y con el precio del petróleo muy por debajo de lo esperado, el gobierno le pasa la factura a las familias mexicanas aumentando los combustibles, manteniendo bajo el salario e incrementando los impuestos.

Sin duda Peña Nieto pasará a la historia como uno de los presidentes que más han golpeado a la economía de los mexicanos.