ESCRITO REALIZADO POR PSICÓLOGA MICHELLE DELGADO TORRES, EN COLABORACIÓN PARA SEMANARIO PUNTO Y APARTE.
La naturaleza y los seres humanos tenemos una conexión neurobiológica, estar en contacto con ella nos proporciona bienestar a nivel físico y mental. Seamos conscientes o no de sus beneficios, siempre está en conexión con nosotros, influyendo de forma positiva y saludable en nuestra vida diaria, regenerando nuestra energía para llevar a cabo nuestra rutina.
Son muchos los beneficios que nos regala nuestra madre naturaleza, sin esperar nada a cambio, nos recibe con los brazos abiertos cuando necesitamos acudir a ella, nos regenera y restaura con energía limpia y nutritiva. Además nos alimenta, nos permite respirar, adaptarnos y evoluciona junto con nosotros para conservar la vida.
El ser humano necesita de la naturaleza para subsistir, dependemos uno del otro para generar el equilibrio que nos mantiene en estado de bienestar. Las personas que son conscientes de la relación y conexión que existe entre nosotros y la naturaleza, perciben los beneficios que obtienen de ella, lo disfrutan y gozan de salud mental y una mejor calidad de vida.
Frecuentar espacios verdes como parques, jardines y bosques hace que las personas se sientan mejor; relajadas, tranquilas e inspiradas, además de experimentar generosidad y confianza hacia los demás. La naturaleza y su color verde producen calma y armonía, aumenta nuestro potencial de salud, buen humor y autoestima.
En los últimos años se han hecho estudios en diferentes países del mundo sobre la influencia y los beneficios que se obtienen de la relación entre el ser humano y la naturaleza, así como su impacto en la salud. Se han dado cuenta que la naturaleza es un componente esencial para una buena salud y un factor influyente en el comportamiento de los individuos.
En zonas donde existen espacios verdes las personas tienden a ser mas sociables, buenos vecinos, reflejan buen humor, manifiestan sentido de comunidad, confianza mutua y una mayor voluntad de ayudar a los demás. Así como un bajo índice de violencia, agresividad o conflictos entre vecinos. En cambio, en entornos con menos espacios verdes o sin ellos, el índice de violencia, agresión, crimen y delitos es mayor.
Además se estudio la relación entre la ausencia de entornos naturales y la irritabilidad, la relación entre exposición a la naturaleza y autocontrol, la disciplina, salud mental, desarrollo infantil, entre otros temas de interés. Los investigadores, psicólogos ambientales, llegaron a conclusiones que reafirmaron los beneficios de la naturaleza. Señalaron que el contacto directo con entornos naturales contribuye a un mayor rendimiento y produce un mejor funcionamiento cognitivo, además de potenciar la auto disciplina, control de impulsos y proporcionar una mayor salud mental.
Al contrario de aquellas personas que no conviven con ambientes naturales, las cuales tienden a sufrir: déficit de atención, síntomas de hiperactividad, trastornos de ansiedad y depresión, tendencia a la obesidad, estrés y otras enfermedades.
«LA NATURALEZA Y EL SER HUMANO SE NECESITAN MUTUAMENTE».
Beneficios emocionales, físicos, interpersonales y mentales del contacto con la naturaleza.
- Caminar , salir de excursión o pasear por espacios verdes estimula nuestros sentidos, aumentan nuestras habilidades intelectuales y nos carga de energía.
- La naturaleza siempre nos acepta. Es abierta, accesible y nos acepta tal y como somos.
- Nos sentimos libres, nos acoge sin juzgarnos, nos permite ser como somos, es uno de los efectos psicológicos curativos mas eficaces.
- Es fuente de inspiración. Nos brinda estímulos únicos que nos ayudan a salir de la rutina, estimula la creatividad, todo a nuestro alrededor se convierte en inspiración.
- Nos ayuda a tomar distancia de las preocupaciones y problemas, parecen lejanos. Nos ayuda a reencontrarnos con nosotros mismos, a despejarnos y volver a la calma.
- Nos invita a un mundo más natural y vivo, nos aleja del acceso a internet y la tecnología. Es necesario.
- Modifica nuestra mente y la ayuda funcionar de forma adecuada y saludable.
- Descansamos, la atención dirigida descansa y se relaja, no más trabajo, preocupaciones y estrés por un rato. Es necesario regenerarnos para continuar.
- Los entornos y espacios naturales nos ayudan a sanar, tengamos en cuenta los espacios con los que estamos íntimamente relacionados, impactan directamente a nuestra salud.
- Genera buen humor, creatividad y promueve la autoestima.
- Contribuye a un mejor desarrollo infantil.
- Produce una mejor calidad de vida.
- Aumenta la calidad de vida en los adultos mayores y disminuye la probabilidad de depresión.
- Promueve la confianza, generosidad, voluntad y relaciones interpersonales satisfactorias.
Los psicólogos ambientales y profesionales en el área de salud mental y bienestar integral humano promueven el contacto con la naturaleza en las diversas etapas de nuestra vida, desde la infancia hasta la adultez mayor, ya que son muchos los beneficios que se obtienen al estar en conexión y relación con ella. Recomiendan a las escuelas proporcionar a los niños espacios naturales para su sano desarrollo y contrarrestar posibles padecimientos como: hiperactividad, obesidad infantil y ansiedad. Así como promover la salud y calidad de vida en las familias y sociedad en general a través del contacto con la naturaleza. Fomentando una conciencia ambiental para el beneficio de todos; seres humanos y naturaleza.
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