En Tijuana, un niño de 5 años fue obligado a poner su cara en la estufa, porque se comió un queso que había en su casa.
El presunto responsable es un hombre de 51 años, quien es la pareja sentimental de la madre del menor.
El niño sufrió quemaduras en el pómulo derecho, pestañas, y sus ojos estaban muy enrojecidos, así lo informó la Secretaría de Seguridad Pública Municipal; este hecho se registró el 30 de marzo.
Quienes se dieron cuenta del suceso fueron las maestras del jardín de niños Lázaro Cárdenas, y pusieron la denuncia ante la Policía Municipal.
Cabe destacar que el infante quedó a disposición del DIF Estatal.
Sin comentarios