Su transformación de Eric Hincapié Ramírez, un joven colombiano fanático a los tatuajes y a la cultura alternativa, a calavera viviente, comenzó poco tiempo después del fallecimiento de su madre, a quien, dice él para medios locales “no quería aterrar con su apariencia“.

Kalaca Skull, como le gusta ser llamado, dice que no recuerda exactamente cuándo comenzó a planear su drástico cambio físico de ciudadano común a calavera de lengua bífida, pero que sus primeros pasos los dio al delinearse el contorno de sus ojos y a pintarse de negro los dientes.

 Luego de esa transformación, se cortó la lengua para que fuera bífida y al poco tiempo, se inyectó tinta en los globos oculares para que lucieran negros, vacíos e inertes, como los de un cráneo completamente limpio.

Sin embargo, para Eric su transformación aún no estaba completa, ya que no era del todo convincente, por lo que pronto comenzó a tatuarse más detalles que lo hicieran lucir aún más cadavérico.

No pasó mucho tiempo antes de que Eric decidiera cortarse las orejas y la nariz para que su rostro realmente pareciera el de un cráneo ausente de piel o el cartílago que le da forma a estas partes.

Kalaca Skull se describe como una persona normal con aspecto diferente, pero en los videos en los que aparece, le gusta jugar con la impresión que su apariencia provoca en los demás.

Para este joven de apenas 22 años de edad, las modificaciones corporales fueron para mostrar con el exterior lo que lleva por dentro.

Las modificaciones corporales son decisión personal y no se deben juzgar, insiste Kalaca Skull cuando los medios locales o los internacionales, le preguntan qué opina sobre su transformación o las reacciones que provoca en la gente.

Para este joven tatuador colombiano, el objetivo no es otro que demostrar que así como luce él, luciremos todos una vez que fallezcamos, pero mientras eso pasa, se dedica a pregonar el respeto por la apariencia y estilo de vida de los demás.