La contadora de 26 años de nacionalidad estadounidense pero residente de esta frontera, Ashley González Reyes, continuará en libertad su proceso luego de que el juez Fidel García Villanueva consideró insuficientes las pruebas de la fiscalía para decretar la prisión preventiva.

La joven no podrá salir de la ciudad o el país y portará un brazalete electrónico luego de que intentó huir del escenario del crimen y tendrá que depositar 900 mil pesos en el Tribunal antes del 14 de febrero como reparación a las tres familias afectadas por el accidente en la vía rápida de Tijuana el pasado domingo.

Si no cumple con alguna de estas medidas ella podría tener prisión preventiva.

Entre las pruebas que presentó el Ministerio Público para que se le determinara la prisión preventiva a Reyes González, fue la intensión de abandonar la escena, ya que por obligación cívica y moral nunca se preocupó por ver cómo estaban las tres víctimas: Miguel Ángel Tovar Vera, Jaciel Vargas Ávila y Francisco Javier Santos Contreras, quienes fallecieron en el lugar de los hechos, y contrario a ello, de acuerdo al testigo de un conductor de Uber, ella y su novio pretendieron huir del lugar.

Al considerar que la imputada tiene la nacionalidad estadounidense, se expuso también que por estar en frontera le daría también la facilidad de abandonar el país y lo que se pretendía era que no fuera a desvincularse del proceso, además que por el hecho de haber consumido bebidas embriagantes por arriba del límite, podría considerarse un peligro para la sociedad.

 

 

Fuente Síntesis