A poco más de tres meses de su secuestro, el menor Carlos Enrique Chan López fue localizado sin vida, informó el colectivo de búsqueda “Todos Somos Erick Carrillo” en sus redes sociales. El joven de 16 años había sido privado de la libertad el pasado 27 de julio en su domicilio, ubicado en la colonia Felipa Velázquez, en Tijuana. El hecho ocurrió frente a su madre y hermanos, quienes vivieron momentos de angustia tras el ingreso de cinco hombres armados que, sin mediar palabra, se lo llevaron.

El colectivo lamentó profundamente el hallazgo: “Gracias a todas las personas que nos apoyaron en compartir la ficha de Carlos Enrique, lamentablemente fue localizado sin vida. Nos unimos a la pena que embarga a la familia de Carlos Enrique Chan López”. Esta lamentable noticia llega después de meses de búsqueda y esfuerzos incansables por parte de la familia y la comunidad para encontrar al menor.

Christina López, madre de Carlos Enrique, relató en su momento que el 27 de julio, alrededor de las 2:00 p.m., cinco hombres armados irrumpieron en su casa y se llevaron a su hijo sin explicación. Según la madre, lo hicieron por error, ya que ella creía que los secuestradores iban por otra persona. La familia, señaló, no tenía problemas con nadie y el menor, que aún estudiaba, no estaba involucrado en actividades que pudieran haber generado este ataque.

En cuanto a los avances en la investigación, la Fiscalía Regional de Tijuana informó que, en octubre, se realizó la vinculación a proceso de tres hombres —Manuel “N”, alias “El Meño”, Jhon “N” y Jessie “N”— por su presunta responsabilidad en el delito de privación ilegal de la libertad agravada. La aprehensión se cumplimentó el 30 de septiembre, y los tres acusados fueron presentados ante la Jueza de Control el 4 de octubre, donde se les dictó prisión preventiva justificada, además de concederse dos meses para la investigación complementaria.

Pese a las detenciones, las autoridades no han descartado la presencia de más cómplices en el secuestro de Carlos Enrique Chan, ocurrido el 27 de julio. Según Rafael Orozco, Fiscal Central de Baja California, se sigue investigando el móvil del crimen, pues preocupa la modalidad del secuestro, que podría estar vinculado a las operaciones de la delincuencia organizada, dado el perfil de las víctimas en este tipo de delitos.

La noticia de la muerte de Carlos Enrique ha generado conmoción en la comunidad y se suma a la creciente preocupación sobre la inseguridad en la región. La familia del joven y el colectivo de búsqueda continúan exigiendo justicia para que se esclarezca este crimen y se haga justicia por la pérdida de su ser querido.