La joven regiomontana cuyo estado de salud era reportado como grave debido a un producto que tomó para adelgazar, falleció la noche del pasado sábado.

Lucero Priscila, tenía tan sólo 24 años de edad y era madre de una niña de un año.

El lunes se dio a conocer la noticia del caso de la mujer que adquirió en Internet unas pastillas denominadas Avitia Cobrax, un producto presuntamente de origen natural.

A raíz de que tomó el producto logró perder 7 kilos, pero también comenzó a presentar fuertes dolores de cabeza que derivaron en un edema cerebral.

La chica fue internada en una clínica particular en donde los médicos lograron sacarla adelante de un paro cardiorrespiratorio, sin embargo finalmente éste sábado murió.

Le sobreviven su esposo y su hija, quienes perdieron la presencia de Lucero Priscila por las pastillas que consiguió en Facebook en un costo de mil 200 pesos.

En redes sociales, se han compartido miles de veces el caso de la mujer desde que fue dado a conocer.

Las autoridades sanitarias en Nuevo León alertaron de la compra de productos “milagro” que se venden para la pérdida de peso.

En rueda de prensa, el Procurador estatal, Bernardo González Garza, dijo que ya se abrió una carpeta de investigación por el caso.

Además lanzó una advertencia para las personas que se dedican a la venta de estos productos.

“Si hay personas que se dediquen a la venta; que están prohibidas por la Ley General de Salud o que estén prohibidas en algún otro reglamento, inclusive de la Secretaría de Salud estatal, se constituya en una conducta delictuosa, tengan la seguridad de que llevaremos a los responsables ante la justicia”, aseguró.

La página en donde la chica compró las pastillas Avitia Cobrax cerró en facebook.

Cofepris, ya había sacado de circulación ese producto que antes se vendía con los nombres de Thermatrim y Pura Alegría.

El deceso de la joven también se ha compartido en redes sociales y se han mandado una alerta para evitar la compra y consumo de estas pastillas que prometen una acelerada pérdida de peso sin dieta ni ejercicio.

 

Fuente Sin Embargo