HIPERPLASIA PROSTÁTICA BENIGNA
La hiperplasia prostática benigna (HPB), también llamada -crecimiento de la glándula prostática-, es una enfermedad frecuente a medida que los hombres envejecen. El crecimiento de la glándula prostática puede provocar síntomas urinarios molestos, como el bloqueo del flujo de orina de la vejiga. También puede provocar problemas de vejiga, vías urinarias o riñón.
Existen varios tratamientos eficaces para el crecimiento de la glándula prostática, entre ellos, medicamentos, terapias mínimamente invasivas y cirugía. Para elegir la mejor opción, tú y tu médico considerarán los síntomas, el tamaño de la próstata, algun otra enfermedad o factor de riesgo que puedas tener y sobre todo, tus preferencias de tratamiento.
SÍNTOMAS
En las personas con HPB, la gravedad de los síntomas varía, pero tienden a empeorar gradualmente con el tiempo. Algunos signos y síntomas son los siguientes:
• Necesidad de orinar frecuentemente o con urgencia
• Aumento de la frecuencia de la orina por la noche (nicturia)
• Dificultad para comenzar a orinar
• Flujo de orina débil o que se detiene y vuelve a comenzar
• Goteo después de orinar
• Imposibilidad de vaciar la vejiga por completo
Los signos y síntomas menos frecuentes pueden ser:
• Infección de las vías urinarias
• Imposibilidad de orinar
• Sangre en la orina (Hematuria)
El tamaño de la próstata no determina necesariamente la gravedad de los síntomas. Algunos hombres con crecimiento leve de la próstata pueden tener síntomas importantes, en tanto que otros hombres con mayor crecimiento de la próstata pueden tener solo síntomas leves.
En algunos casos, los síntomas se estabilizan con el tiempo e incluso pueden mejorar.
CAUSAS
La glándula prostática se encuentra debajo de la vejiga. El conducto que transporta la orina desde la vejiga hacia el exterior del pene (uretra) pasa por el centro de la próstata. Cuando la próstata se agranda, comienza a obstruir el flujo de orina.
La mayoría de los hombres presentan un crecimiento continuo de la próstata a lo largo de la vida. En muchos hombres, este crecimiento continuo agranda la próstata lo suficiente como para provocar síntomas urinarios o para obstruir considerablemente el flujo de orina.
No queda totalmente claro qué provoca el agrandamiento de la próstata. Sin embargo, podría deberse a cambios en el equilibrio de las hormonas sexuales a medida que los hombres envejecen.
FACTORES DE RIESGO
Los factores de riesgo del crecimiento de la glándula prostática son los siguientes:
• Envejecimiento.
• Antecedentes familiares.
• Diabetes y enfermedad cardíaca.
• Estilo de vida.
COMPLICACIONES
Las complicaciones de la HPB pueden comprender:
• Incapacidad repentina para orinar (retención urinaria). Es posible que necesites que te inserten un tubo (sonda) en la vejiga para drenar la orina. Algunos hombres con HPB requieren una cirugía para aliviar la retención urinaria.
• Infecciones urinarias. La incapacidad para vaciar completamente la vejiga puede aumentar el riesgo de infección en las vías urinarias.
• Cálculos (piedras) en la vejiga. Estos generalmente se producen debido a la incapacidad de vaciar completamente la vejiga. Los cálculos (piedras) en la vejiga pueden causar infección, irritación de la vejiga, sangre en la orina y obstrucción del flujo de orina.
• Daño en la vejiga. Si la vejiga no se ha vaciado por completo, esto puede hacer que se estire y se debilite con el tiempo. Como consecuencia, la pared muscular de la vejiga ya no se contrae correctamente, y esto hace que sea más difícil vaciar completamente la vejiga.
• Daño renal. La presión en la vejiga debido a la retención urinaria puede dañar directamente los riñones o permitir que las infecciones en la vejiga lleguen a los riñones.
Se cree que la HPB no aumenta el riesgo de padecer cáncer de próstata.
DIAGNÓSTICO
Tu médico hará preguntas detalladas sobre tus síntomas y te realizará una exploración física. Es probable que este examen inicial comprenda:
• Tacto rectal. El médico inserta un dedo en el recto para detectar si esta crecida.
• Análisis de orina. El análisis de una muestra de orina puede ayudar a descartar una infección u otras enfermedades que pueden ocasionar síntomas similares.
• Análisis de sangre. Los resultados pueden indicar problemas renales.
• Análisis de sangre para el antígeno prostático específico. El antígeno prostático específico es una sustancia que se produce en la próstata. Los niveles de antígeno prostático específico aumentan en casos de crecimiento de la próstata.
Después de eso, el médico te puede recomendar pruebas adicionales para ayudar a confirmar el crecimiento de la próstata y descartar otras enfermedades. Estas pruebas pueden comprender las siguientes:
• Prueba del flujo urinario. Debes orinar en un recipiente que está conectado a una máquina que mide la fuerza y la cantidad de tu flujo urinario. Los resultados de la prueba ayudan a determinar si tu afección mejora o empeora con el tiempo.
• Prueba de orina residual posterior al vaciado. Esta prueba mide si puedes vaciar tu vejiga por completo.
• Diario de vaciado de 24 horas. Registrar la frecuencia y la cantidad de orina puede resultar especialmente útil si más de un tercio de la eliminación de orina diaria ocurre por la noche.
Si tu trastorno es más complejo, es posible que el médico recomiende:
• Ultrasonido transrectal.
• Biopsia de la próstata.
• Estudios urodinámicos y de presión de flujo.
• Cistoscopia.
TRATAMIENTO
Hay una amplia variedad de tratamientos disponibles para la HPB, entre ellos, terapias mínimamente invasivas y cirugía. La mejor opción de tratamiento para ti depende de varios factores:
• El tamaño de tu próstata
• Tu edad
• Tu salud en general
• El grado de molestias o trastornos que estás padeciendo
Si los síntomas son tolerables, puedes decidir posponer el tratamiento y simplemente vigilar tus síntomas. Para algunos hombres, los síntomas pueden aliviarse sin tratamiento.
MEDICAMENTOS
Los medicamentos son el tratamiento más frecuente para los síntomas leves a moderados.
Algunas de las opciones son:
• Alfabloqueantes. Estos medicamentos relajan los músculos del cuello de la vejiga y las fibras musculares de la próstata, lo que hace que orinar sea más fácil. (tamsulosina)
• Inhibidores de 5-alfa reductasa. Estos medicamentos achican la próstata ya que previenen los cambios hormonales que producen el crecimiento de la próstata. (finasterida)
• Terapia con combinación de medicamentos. El médico te puede recomendar que tomes un bloqueante alfa (tamsulosina) y un inhibidor de 5-alfa reductasa (finasterida) al mismo tiempo, si por separado ninguno de ellos es efectivo.
• Tadalafilo (Cialis). Hay estudios que sugieren que este medicamento, que a menudo se administra para tratar la disfunción eréctil, también puede tratar el crecimiento de próstata.
Terapia mínimamente invasiva o quirúrgica
Hay varios tipos
Resección transuretral de la próstata (RTU)
Se introduce un endoscopio (tubo con una cámara) iluminado en la uretra y el cirujano extrae todo salvo la parte externa de la próstata. Por lo general, la resección transuretral de la próstata alivia rápidamente los síntomas, y la mayoría de los hombres tienen un flujo de orina más fuerte muy pronto después del procedimiento.
Incisión transuretral de la próstata
Se introduce un endoscopio (tubo con una cámara) iluminado en la uretra y el cirujano realiza uno o dos cortes pequeños en la próstata, para facilitar el paso de la orina a través de la uretra.
Terapia con láser
Un láser de alta energía destruye o elimina el exceso de tejido prostático. La terapia láser generalmente alivia los síntomas de inmediato y tiene menos riesgo de efectos secundarios que la cirugía sin láser. La terapia láser puede usarse en hombres que no deberían someterse a otros procedimientos prostáticos porque toman medicamentos anticoagulantes.
Prostatectomía (extirpación de la prostata)
El cirujano realiza una incisión en la parte inferior del abdomen para alcanzar la próstata y extraer tejido. La prostatectomía abierta generalmente se hace si tienes una próstata muy grande, daños en la vejiga u otras complicaciones. Normalmente, la cirugía requiere una breve estancia hospitalaria y está asociada con mayor riesgo de requerir una transfusión de sangre.
Entre varias otras opciones, pero estas son de las mas comunes…
Ante la presencia de cualquier síntoma arriba mencionado, acude con tu medico de cabecera para que entre los dos revisen las opciones o el plan de tratamiento que mejor te convenga.
Recuerda que este y otros temas los encontraras en el podcast Medicina Para No Medicos, disponible en todas las plataformas digitales.
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