Por el feminicidio de su hija recién nacida, Esteban V., obtuvo una sentencia de 27 años y seis meses de prisión.

El 12 de abril del 2016 fue denunciado el supuesto robo de la niña Valentina, de apenas 20 días de nacida, en San Pedro Cholula, Puebla. Sin embargo, su padre, Esteban confesó mas tarde que la mató porque no quería hacerse cargo de ella.

El hombre, en ese entonces de 19 años de edad, abandonó el cuerpo de Valentina detrás del basurero del municipio de Calpan.

El Observatorio Ciudadano de Derechos Sexuales y Reproductivos calificó el crimen como un feminicidio. Sin embargo, el Poder Judicial determinó que el delito es un homicidio en grado de parentesco.

Esteban confesó que no quería que naciera su hija Valentina pues tuvo que dejar sus estudios para trabajar en una pizzería.

El 12 de abril, al salir de la clínica 2 del IMSS en este municipio, el joven llamó “desesperado” a las autoridades para denunciar que le habían arrebatado a su hija.

De acuerdo al reporte que Esteban dio inicialmente “los delincuentes habrían huido en un automóvil tipo Tsuru color negro, con vidrios polarizados y sin placas”. Pero un boletín enviado por el Ayuntamiento de San Pedro Cholula se aclaró que las autoridades recorrieron las calles con el padre abordo de la patrulla para intentar hacer una reconstrucción de los hechos.

Esteban cayó en contradicciones hasta que confesó que él había matado a la menor, asfixiándola hasta que perdió el conocimiento y luego tiró su cadáver.