ESCRITO REALIZADO POR PSICÓLOGA MICHELLE DELGADO TORRES.
Una de las experiencias que marcan un antes y un después en la vida de algunas mujeres, es la maternidad, una etapa que trae consigo cambios en diversas áreas. La vida que se tenía ya no es la misma, las prioridades y necesidades se intercambiaron por otras, para crear un ambiente diferente y adecuado para la nueva madre y el recién nacido.
Además de los cambios profundos que llegan con esta nueva etapa, la madre se experimenta diferente, los sentidos están más alerta, la intuición se hace más clara y si la madre escucha su instinto o intuición materna, se permite ser guiada para criar de la mejor manera posible a sus hijos/as. Es una etapa que además de exigirnos mucho a nuestra persona y desempeño como madre, también es maravillosa.
La maternidad y la crianza nunca han sido fáciles, ni siquiera en tiempos anteriores, pero ahora con los avances en la tecnología, la influencia que tiene en nuestra sociedad, la lucha de la mujer por la igualdad y su desarrollo en diferentes ámbitos, han ido modificando a la maternidad. Anteriormente la mujer se quedaba en casa exclusivamente para criar a los hijos/as y atender el hogar, aparentemente se contaba con el tiempo para atenderlos. Pero ahora la mujer se ha ido empoderando, podemos descubrirlas en diversos ámbitos, desempeñándose profesionalmente y personalmente, llevándola a experimentar independencia y valoración por ella misma. Ya que ha comprobado que puede realizar todas las tareas que se proponga.
Pero tener una lista larga de actividades y cosas por hacer en ocasiones pone a la maternidad en segundo lugar, ocasionando a la madre sentimientos de culpa, tristeza y desesperación, por el tiempo reducido de convivencia, tiempo de calidad casi inexistente y un vinculo que se percibe cada vez mas separado. Son momentos difíciles tanto para las madres como para sus hijos, ya que ellos pueden llegar a experimentar tristeza, frustración, baja autoestima y abandono.
Es importante que la madre disfrute y ejerza su maternidad en la actualidad, que experimente las maravillas de relacionarse de forma consciente, cercana y presente con sus hijos. A pesar de la rutina, es posible generar y encontrar momentos para disfrutar plenamente de esta hermosa etapa y que todos los involucrados se beneficien de ella ampliamente.
Estudios actuales demuestran que algunas mujeres que se convierten en madres experimentan plenitud y bienestar. Es una etapa que consigue obtener lo mejor de cada una, les permite conocer a una nueva versión de sí mismas, mejorar capacidades, descubrir y desarrollar algunas otras para beneficio propio y de sus hijos/as. La maternidad son momentos que se construyen día a día, ese vínculo que se desarrolla naturalmente, necesita continuar nutriéndose a través de los primeros años de vida, el vínculo entre madre e hijo/a proporciona seguridad, confianza, amor y bienestar para ambos, pues se están creando las bases más importantes y trascendentales en el desarrollo del niño/a y la experiencia maternal de la madre.
La mujer actual que también se ha convertido en madre ¿Cómo puede desempeñar ambos roles?
- Podría comenzar por definir qué persona desea ser y como quiere vivir sus experiencias
- Definir sus prioridades.
- Identificar necesidades y como satisfacerlas.
- Generar un equilibrio entre roles y actividades.
- Evitar anhelar ser la «Mujer maravilla». Eres única y haces lo mejor que puedes.
- Elimina la sobrecarga de tu lista de quehaceres.
- Centra tu atención en las cosas realmente importantes.
- Procura crear y contar con una red de apoyo para sobrellevar las múltiples actividades.
- Regálate tiempo para tus hobbies y relajarte.
- Haz siempre lo mejor que tú puedas y siente la satisfacción de cada tarea realizada. No tiene que ser perfecta.
Integrar a la mujer y la madre que existen en ti, es posible, acéptalas con amabilidad y amor, no es necesaria una división entre ambas, finalmente son la misma persona y cada uno de los roles desea el bienestar del otro, uno depende del otro, colaboran para tu beneficio y plenitud.
Integrar a la mujer y la madre que existen en ti, es posible, acéptalas con amabilidad y amor, no es necesaria una división entre ambas, finalmente son la misma persona y cada uno de los roles desea el bienestar del otro, uno depende del otro, colaboran para tu beneficio y plenitud.
¿Cómo disfrutar de la maternidad en la actualidad?
- Escucha tu ser interior y necesidades, atiéndelas.
- Define tus prioridades.
- Organízate y administra tu tiempo adecuadamente. No te satures de quehaceres.
- Dedica tiempo a ser. La mejor mamá no es la que mantiene la casa siempre ordenada. Es aquella que se ama a sí misma, se trata con amabilidad, descansa y se procura bienestar para ella y sus hijos.
- Regálate tiempo para jugar, relajarte y divertirte con tus hijos. Todos lo necesitan.
- Vuelve a los juegos tradicionales que fomenten la convivencia: juegos de mesa.
- Encuentra un tiempo en el día para salir a caminar, tomar un helado o ir al cine con ellos/as.
- Celebra, disfruta y respeta cada uno de los logros en las diferentes etapas en el desarrollo de tus hijos/as. Pues es un reflejo de tu trabajo y dedicación.
- La prisa es el peor enemigo de la crianza, minimízalas y agradece cada momento vivido en el presente.
- Acéptate y acéptalos incondicionalmente.
Disfruta, celebra, acepta y respeta tu maternidad, es una etapa de la vida relativamente corta la cual te involucra a ti y a tus hijos/as, vívela al máximo, escucha tu instinto materno, permítele guiarte, confía en tu sabiduría y naturaleza. Que la rutina y las múltiples actividades no estropeen tu experiencia de plenitud y bienestar en la maternidad, se consciente de lo que es realmente importante para ti, decide y diseña esta maravillosa etapa para tu propio bienestar y el de tus hijos.
Gracias pequeños maestros, cálidas compañías y ejemplos del amor incondicional y puro hacia nosotras, sus madres.
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